No dejamos de mentar la pobreza, la riqueza, la escasez, la abundancia,
nos movemos en estas dualidades.
Todos tenemos derechos, obligaciones, deberes, deseos, pero....
Vivimos tiempos extraños, donde subimos como la espuma,
y luego se desvanece.
Nos dicen que vamos a empobrecernos,
que los ricos van a ser menos pero con más cuota de mercado,
van a poseer casi toda la riqueza del planeta, incluso la humana,
porque nos quieren esclavos, sometidos y ofreciéndoles pleitesía. Pero...
Somos pobres creo que en la biblia se escribió, somos pobres de espíritu, y de corazón,pero...
Aquí seguimos lamentándonos, llorando, apenados y añorando mejores días de vino y rosas, aquí seguimos soñando en ser lo que no somos, en anhelar lo que no tenemos, pensando que consiguiendo lo que no poseemos seríamos más felices, plenos, y todos nuestros males se acabarían,pero...
El dinero no da la felicidad pero ayuda, ¿ pero tú que sabes de felicidad?, serías capaz de contarme en tres palabras que es ser feliz, que necesitarías para sentirte plenamente feliz.
Somos pobres, pero pobres de amor, empatía, compasión, comprensión, coherencia, simpleza,
belleza, respeto... Muy ricos de envidia, deseos de dinero, posesiones, mansiones, piscinas y
todo lo que se pueda comprar, pero... seguimos siendo infelices ¿por qué?.
Porque todavía no hemos entendido, ni siquiera encontrado donde está nuestra felicidad, como
llenar nuestra alma de sensaciones, sentimientos simples, de pequeñas cosas, que no se compran,
vivir disfrutando de cada segundo por respirar, mirar, oír, andar, soñar, estar con los que queremos aunque no sea físicamente. Ser felices es un estado que solo se llega con la evaporación de los apegos, donde se hincha el corazón por gratitud de todo lo que la vida te brinda cuando
eres capaz de calentarte al sol, sentir la brisa en tus mejillas, ver los pájaros volar, y el agua fresca
corriendo entre tus dedos.
Somos pobres y más seremos si no comprendemos que la vida es una posesión que nos pueden arrebatar, pero que solo nosotros podemos disfrutar en cada instante, en cada segundo,
buscando lo que solo encontraremos dentro de cada uno. Nada de fuera nos aportará lo
suficiente porque todo se pierde, gasta o rompe, y no lo quitan.
Si queremos dar ese salto cualitativo como especie, tendremos que acercarnos más a la naturaleza, pensar con el corazón y sentir con la cabeza, soñar y soñar... ser amantes de lo simple,
no envidiar al prójimo, ni esperar que te den lo que no eres capaz de tomar u ofrecer.
Somos pobres porque nos hacemos ricos con las miserias, explotaciones y sometimiento de otros
como nosotros, que callando... consentimos, que consumiendo ... nos hacemos coautores.
Desde mi ventana grito, soy feliz, porque aún con tristezas siento el aquí y el ahora como algo
intenso y lleno de fuerza. Explicarlo con palabras es difícil, sentirlo es experimentarlo,
comprenderlo es usar el corazón.
***Por construir castillos en el aire
a pleno sol, con nubes de algodón
en un lugar, adonde nunca nadie
pudo llegar usando la razón.
Y por abrir ventanas fabulosas,
llenas de luz, de magia y de color
y convocar al duende de las cosas
que tienen mucho que ver con el amor.
Acaba aquí la historia del idiota
que por el aire, como el aire libre,
quiso volar igual que las gaviotas...,
pero eso es imposible..., ¿o no?...
a pleno sol, con nubes de algodón
en un lugar, adonde nunca nadie
pudo llegar usando la razón.
Y por abrir ventanas fabulosas,
llenas de luz, de magia y de color
y convocar al duende de las cosas
que tienen mucho que ver con el amor.
Acaba aquí la historia del idiota
que por el aire, como el aire libre,
quiso volar igual que las gaviotas...,
pero eso es imposible..., ¿o no?...
ALBERTO CORTEZ( Canción).
Imagen de Google.